Motor magnético_ Parte2_

Pues bien, después de escribir la entrada del motor magnético continué trabajando con las fuerzas de los imanes, teóricamente claro, y sacándole problemas a cada nueva modificación que hacía sobre el anterior diseño.

Acabé aquella carilla, y continué con otros folios inacabados aún, y es que ahora estoy en el delicado punto de decidir que orientación deberían llevar los imanes para que además de girar leviten. Para eso, creo que me pueden ser útiles las estrellas complementarias, aunque convertidas en polaridades,, y para eso debo saber un poco más sobre ellas...

Este es aquel primer folio ya completo, la nueva parte es la de arriba a la izquierda, donde lo primero que escribí fue ¿runas? , así es, me preguntaba si las runas podían de algún modo ayudarme en algo,, pero dada mi ignorancia al respecto, esa alternativa quedó en el olvido.

Lo siguiente dice: círculos concéntricos hacia arriba,, la idea era mantener unos imanes repeliéndose de los extremos y atrayéndose en el centro, de modo que levitasen además de girar. Una vez conseguido que giren sin invertir constantemente en ellos energía,, extraer electricidad de él sería factible con unas bobinas lo suficientemente cerca para ser inducidas.

Algún que otro, al mostrarle la idea me dijo que no se podía obtener energía de la nada, que ésta solo se transforma,, pero un imán puede inducir a que una bobina varíe su flujo magnético, y con ésto producir una intensidad y una tensión,, y si no me equivoco, el imán no le transfiere esa energía, sino que la comparte durante el tiempo que está cerca. Además de esto, los imanes tienen la habilidad innata de repelerse y atraerse,, jugando con estos dos factores veo bastante claro que un movimiento perpetuo es posible,, tan solo hay que distribuirlos de una manera estabilizadamente inestable.

De modo que sobre la marcha dibujé el primer boceto,, en él, las dos cúpulas de los extremos repelerían al conjunto de imanes cercano y éstos a la vez que se repelen, se atraerían al centro de tal modo que en ningún momento su orientación con éste sea estable.

Entre otras dudas, preguntas y problemas,, en ésta carilla me planteo la posibilidad de que el central se gire, orientándose con los dos que lo rodean. Aunque esto lo solucioné en la siguiente carilla, así como el modo, cuanto menos curioso de hacer que los extremos repeliesen a sus respectivos adyacentes, no será tema de hoy, si te interesa tendrás que esperar a la siguiente parte_